Me ha gustado Da Nang. El hotel era maravilloso, justo en la playa. Su ubicación era en primera línea de playa, a un fácil paseo de Bai Tam Pham Van Dong. Estaba en las proximidades de cafeterías y restaurantes, del aeropuerto y también de los taxis. La habitación era perfecta, tenía una decoración perfecta y un minibar, una caja fuerte para portátiles y una chimenea de piedra. Todo el personal era educado y muy bueno. Los servicios eran excelentes.

Las habitaciones son enormes y súper limpias, con una ducha a ras de suelo. Camas súper cómodas y además hay un minibar, una caja fuerte y una chimenea de piedra. En el hotel se respiraba un ambiente especial. Sirven bebidas deliciosas en el bar en la azotea, y el servicio allí es muy bueno...

La habitación era muy espaciosa, soleada y cómoda. Tenía una ducha adaptada, un secador de pelo y toallas de baño incluidos. Las vistas desde la habitación eran asombrosas. La ubicación del hotel era estupenda, con una calle comercial y un mercado a poca distancia.

El hotel está muy limpio. El personal es muy amable. El desayuno es abundante y genial. Todo el interior es muy moderno. Las habitaciones son modernas. La ubicación es excepcional, a 2 km está el Puente del Dragón. Está en una zona de playa con vistas al mar. Un restaurante estupendo que sirve especialidades de la cocina asiática. Quedarse aquí es una experiencia agradable.

La ubicación del hotel es perfecta, justo al lado de la playa. Además, estaba frente al océano, lo que nos brindó unas vistas impresionantes. La habitación era muy cómoda y estaba súper bien decorada. El baño era amplio y tenía todas las comodidades necesarias. El servicio fue excelente, el personal era amable y atento. El desayuno era delicioso, con una gran variedad de opciones. disfrutamos de las instalaciones del spa, que eran increíbles. Definitivamente valió la pena cada dólar que pagamos.

La única cosa negativa fue que nos hubiera gustado quedarnos más días.